De Zeneggan a la Argentina

Familiares que participaron en el reencuentro de los Andrés, donde se destacaron los hermanos Juan, Clementina, Serafina y Teresa Andrés.

Descendientes de Juan Andrés y Matilde Kumer se reencontraron en San Jerónimo Norte en 2013. Recordaron a sus antepasados de nacionalidad suiza helvética y religión católica. La reunión se concretó luego de varias postergaciones pero fue emotiva, ya que después de años sin verse muchos familiares compartieron lindos momentos.

TEXTOS. REVISTA NOSOTROS. FOTOS. GENTILEZA RUBÉN SATTLER.

“Esta historia se la dedicamos a María y a Serafina, que ya no están con nosotros, pero siempre las tendremos en nuestros corazones”, explicó Rubén Sattler cuando se comunicó con De Raíces y Abuelos. Quería compartir con nuestros lectores las vivencias que tuvieron los descendientes de Juan Andrés y Matilde Kumer cuando se reencontraron en San Jerónimo Norte, el 19 de mayo de 2013.

La reunión se concretó -aclaró- luego de varias postergaciones pero fue emotiva, ya que después de años sin verse se reencontraron muchos familiares.

Según contó, el día frío no opacó la fiesta que se prolongó, luego del almuerzo, hasta horas de la noche entre charlas, mates de por medio, y anécdotas. Se armó una mesa donde cada uno presentó fotos familiares (“muchas de las cuales nunca habíamos visto”). Dos tías que viven muy lejos una de otra se volvieron a encontrar después de muchos años sin verse. Hubo lágrimas y abrazos. No sabían que se iba a reencontrar con la hermana.

Y continuó: “El tiempo nos jugo una mala pasada dado que había llovido y algunos no pudieron viajar. Después de esta primera reunión prometieron volver a reunirse todos los años. Para recuerdo de las generaciones futuras, hijos, nietos, bisnietos y tataranietos de Juan y Matilde firmaron un pergamino recordatorio. El encuentro sirvió para presentar la historia del apellido Andrés cuya historia y genealogía logré reunir, luego de varios años de búsqueda”.

En relación con la historia del apellido, advirtió que “nuestra rama de los Andrés tiene su origen en Suiza en varios municipios en el distrito de Visp: en Staldenstaldenried, Torbel, Zeggenen. Cabe mencionar -entre otros antepasados- a Petrus Josefo en 1475 en Zender Raron; Pedro Vicario de Visp en 1511; Crhistian, Matías y Nicolás de Visp en 1691; Teófilo en Torbel en 1708; Peter Joseph en Stalden en 1791; Stepan en ZenderRaron en 1810; Peter Joseph en Zeggenen en 1835; Viztun Andrés en Zeggenen en 1856; Peter Joseph en 1870”.

APELLIDO CENTENARIO

Por otra parte, Rubén Sattler explicó que “el apellido Andrés ha estado presente en Suiza durante más de cinco siglos: incluso permanece en la actualidad. El escudo más antiguo de los Andrés data de 1617, en la viga de una estufa con las iniciales M. A. Andrés”.

Según los archivos de inmigración, Joseph Andrés era de nacionalidad suiza helvética y religión católica. De profesión jornalero, llegó a la Argentina en el barco “Entre Ríos”, habiendo embarcado en Havre.

Viajaron con Joseph las siguientes personas: Benedic Andrés, Benedic Andrés (hermano), Víctor Andrés (hermano), Josephine Andrés (hermana), Kaspar Andrés (hermano) y María Andrés (hermana). Se radicó en la zona de Bauer y Siguel. Primeramente era de profesión jornalero. Hacia el año 1918 se casa con Klementina Ritz (tatarabuela de Rubén Sattler), de nacionalidad suiza.

También viven sus últimos años en la zona de San Antonio (provincia de Santa Fe). Tuvieron 8 hijos (aunque es un dato que me falta verificar -según aclaró Sattler-; son datos que recordaban familiares mayores).

Uno de sus hijos (Juan José) se casó con Matilde Kumer (Kummer) nacida en 1904, hija de Alejandro Kumer y Sabina Furrer. Como era costumbre en esa época, la novia se casaba de vestido negro, según se puede ver en una foto del casamiento de ellos.

Juan y Matilde siempre vivieron en el campo. Hacia los últimos años se radicaron en San Jerónimo Norte. Según cuentan los hijos, tenían unas vaquitas que ordeñaban, pero Juan nunca lo hacía. Ya su madre les decía a los nietos cuando eran chicos que no era amigo de ir a ordeñar. Él sólo se dedicaba a llevar la leche. Por este motivo, siempre le tocaba ordeñar a Matilde junto a sus hijos. Tenía por sobrenombre “Piti flauta” porque dicen que fumaba la pipa y tocaba la flauta.

Juan y Matilde (abuelos de Rubén Sattler) tuvieron varios hijos: Juan José Andrés (casado en 1957 con Vilma Udrisar), Pedro Andrés (casado con Regina Gauchat), Pablo Andrés (casado con Norma Wenk), Rosa Andrés (casada con Reinaldo Zurschmiten), Matilde Teresa Andrés, Luis Andrés (casado con Fernández), Serafina Andrés (casada con Carlos Migliaso), Clementina Andrés (casada con Cirilo Federichi) y Ana María (casada con Jacinto Sattler).

“Por relatos de los descendientes se sabe que tuvieron uno o dos hijos pero que fallecieron al nacer. Sin embargo, no encontré registros de ello todavía, por lo que queda pendiente de registrar”, aclaró Sattler.

INICIO Y FIN

Por último, refirió que “hoy los descendientes de Peter Joseph Andrés y Klementina Ritz están en gran parte del país, muchos de los cuales no fueron mencionados sino que sólo expliqué la rama de mis abuelos. El trabajo se fue concretando gracias a la colaboración y ayuda de tíos, primos y familiares de Suiza. Empezamos a mantener correspondencia vía e-mail gracias a los cuales pude armar la rama de los antepasados. Pero queda pendiente ahora terminar la rama de mi abuela Kumer (Kummer)”.

Y concluyó: “Todo en la vida tiene un inicio y un fin; nosotros, los seres humanos no somos la excepción. Tan natural como la vida es la muerte pues a todos nos llegará en algún momento dormir el sueño eterno. A veces es difícil de aceptar que uno de nuestros seres queridos ya no nos acompañará más, que no volveremos a disfrutar de estar con él o ella, que no lo/la volveremos a escuchar. Unos días después de la fiesta falleció una prima que no había podido estar presente. Y más tarde nos llegó la triste noticia de que falleció nuestra tía Serafina, quien -después de mucho tiempo- se reencontró con sus familiares con los que había compartido un día lleno de recuerdos y emociones”.